PAPEL
Realización de papel a mano de fibra vegetal.
Extrayendo las fibras de las plantas y procesándolas hasta convertirlas en
papel.
El
proceso consta de varios pasos que van desde la recolección o poda del vegetal
pasando por la cocción, deslignificación, lavado, licuado, formación de la
hoja, prensado y secado. Cada fibra posee características peculiares las cuales
se multiplican si se las combina entre sí para crear papeles con nuevas
variables de color, tamaño, formato, textura, espesor, fortaleza, flexibilidad
o grado de transparencia. Formio, banano, palmera, yuca, araucaria, yerba mate,
alcaucil o algas marinas son algunas de las plantas utilizadas.
Se
emplean técnicas chinas, mayas e incas. El destino de estos papeles en el
mercado es múltiple: cortinas, elaboración de libros, carpetas, cubiertas,
tarjetería fina, menús, pantallas para lámparas, soporte para dibujo, grabado,
pintura y escultura.
PAPIROS ¿Cómo se fabrican papiros? Según el libro
“Papiros en la
Antigüedad Clásica ” de Naphali Lewis, “…se hace el papel de
la planta de papiro separándolo con una punta de aguja en tiras muy delgadas.
La mejor calidad viene del centro y desde allí en el orden del corte. ...Se
fabrica sobre una tabla humedecida con agua del Nilo; el líquido barroso sirve
como ligante. Primero va extendida, plana sobre la tabla, una capa de tiras de
papiro dispuestas verticalmente, tan largas como sea posible. Después de ésta,
una capa cruzada completa la construcción.
Luego se comprime en prensas y las hojas se
secan al sol y se empalman unas con otras, en orden decreciente de excelencia.
Nunca hay más de veinte hojas en un rollo”.
Encuadernación
El oficio
de la construcción y restauración de libros es una tarea que implica no sólo
paciencia para avanzar paulatinamente en el proceso mismo, sino un afecto que
trenza el aprecio por el rescate de un bien cultural, el respeto y el cuidado
del quehacer, y un contacto que relaciona al libro con su restaurador, que
luego de sentirlo suyo lo deja ir para que siga teniendo vida propia.
Conservación de Fotografías
El
artesano conservador de fotografías domina las técnicas de identificación;
conoce el daguerrotipo, el platinotipo, las fotografías blanco y negro y color,
el negativo, la diapositiva o el archivo digital; conoce la historia y los
materiales que constituyen y soportan las imágenes.
Su trabajo consiste en conservar tanto la
imagen como el soporte. Si deseamos legar a las futuras generaciones este
patrimonio tan valioso y tan frágil se debe conocer los procedimientos y
condiciones específicas que cada sistema requiere.
Para conservar el patrimonio fotográfico es
necesario elegir los soportes más adecuados para su montaje o exhibición. El
embalaje y el guardado no son temas menores a la hora de tener que garantizar
la permanencia y protección de la imagen. También es necesario conocer tipos de
emulsiones, resistencia de los soportes, color, acabados de superficie,
compactación, flexibilidad y estabilidad de los materiales así como la
expectativa de vida de las fotografías. 
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